por Mario Hubert Garrido
La Paz, 25 mar (PL) El destacado realizador boliviano, Jorge Sanjinés (1936), señaló hoy que el cine es un importante instrumento para la construcción de identidad de los pueblos. En declaraciones exclusivas a Prensa Latina, el ganador del Premio de las Artes 2008 de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra Américas (ALBA), admitió sentirse honrado con este reconocimiento que pertenece sobre todo a sus colaboradores, remarcó.
En el celuloide, dijo, nuestros pueblos se ven identificados con su historia, sus tradiciones, sus culturas, un mensaje que los grandes medios informativos pretenden silenciar.
Sanjinés ponderó además la tremenda huella que deja en los procesos de liberación nacional en Bolivia y en otros países el empleo del cine para denunciar las injusticias de que han sido víctimas las naciones oprimidas por el imperio estadounidense.
Entre los amantes del séptimo arte es bien conocida la cinta rodada en Ecuador, Llosky Kaymanta (¡Fuera de Aquí!, 1977) donde Sanjinés deja al descubierto las maniobras de grupos norteamericanos para quedarse con tierras de los indígenas.
Acerca del Premio ALBA 2008 manifestó que es un estimulo que le honra muchísimo pero también a las personas que le acompañaron en su trayectoria. “Se trata de un premio a la obra de amor, compromiso y talento de muchos colaboradores”, afirmó.
Sanjinés es uno de los fundadores del Nuevo Cine Latinoamericano, con obras tan destacadas como El coraje del pueblo (1971) y cortos como Sueños y Realidades (1962) y Una Jornada Difícil (1963).
Su cortometraje Revolución (1963), el más conocido y logrado, recibió el premio Joris Ivens 1964 en Leipzig.
También son populares los mediometrajes Un Día Paulino, y ¡Aysa! (Derrumbe, 1964).
El director paceño, que encabezó el mítico grupo Ukamau, columna vertebral del cine boliviano, señaló además que los realizadores deben visualizar correctamente a los destinatarios y trabajar en la elaboración de un lenguaje en función de ellos.
Junto al brasileño Glauber Rocha, el cubano Tomás Gutiérrez Alea y el mexicano Arturo Risptein, Sanjinés —quien vivió varios años en el exilio perseguido por las dictaduras— está considerado uno de los principales directores latinoamericanos, por presentar una coherencia absoluta, obrando en consecuencia con sus ideas. Sus guiones siempre apuntan a la defensa del mundo andino, fieles a su cosmovisión.
En febrero último, su obra La nación clandestina se incluyó entre los 100 filmes iberoamericanos más destacados de la historia, según la encuesta mundial realizada por el portal cinematográfico www.noticine.com.
Interpelado acerca de los nuevos proyectos, precisó que actualmente dirige el Fondo Cultural del Banco Central de Bolivia, que ocupa su mayor tiempo en iniciativas de carácter social.
El Premio del ALBA de las Letras y de las Artes surgió con el propósito de reconocer y destacar a creadores vivos que han consagrado de manera sostenida su vida y el conjunto de sus obras a engrandecer el patrimonio cultural del continente con aportes originales en cualesquiera de los géneros.
Por segunda ocasión la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América, mediante su proyecto ALBA Cultural, otorga este premio, el cual será entregado en la próxima cumbre del organismo regional que se celebrará en Venezuela.
Las nominaciones fueron presentadas por diversas instituciones culturales y académicas de América Latina y el Caribe, seis de las cuales correspondieron a las letras y siete a las artes.
El Premio del ALBA de las Letras 2008 recayó en el poeta y ensayista cubano, Roberto Fernández Retamar.
Fuente: PL, La Ventana
